NOTICIAS
Una mirada al trabajo social de nuestro policlínico
La labor de la trabajadora social es de suma importancia para el desarrollo de la sociedad teniendo como objetivo mejorar el bienestar humano y ayudar a satisfacer las necesidades básicas de todas las personas, prestando especial atención a las necesidades y el empoderamiento de aquellas que son vulnerables, oprimidas y que viven en la pobreza.
Cuenta con un gran abanico de oportunidades de intervención, todos ellos con un enfoque preventivo, constructivo y eminentemente integrador, donde la persona constituye la preocupación central.
En el sector salud
Uno de los campos de mayor demanda que ocupa la trabajadora social es el sector sanitario. En él, reconoce las carencias y necesidades sociales que inciden en el proceso salud/enfermedad, identifica las redes familiares y sociales y promueve la utilización de los recursos disponibles para la recuperación y bienestar de los pacientes. Realiza acciones de investigación, planeación y programación, educación social, promoción, prevención, asesoría social y evaluación orientadas a la recuperación de la salud y la participación activa de nuestros asegurados.
La trabajadora social en Atención Primaria
Melina López Chávez, trabajadora social de nuestro policlínico Alberto Barton, nos cuenta que en atención primaria se trabaja de manera conjunta con el médico de familia, la obstetra, ginecólogo, personal de enfermería, admisión y dirección. “Somos un equipo multidisciplinario que tenemos por objetivo que el paciente se sienta escuchado, se informe sobre el uso adecuado de nuestro sistema de salud y que conozca cuáles son sus deberes y derechos como paciente”, señala Melina.
En nuestro policlínico Alberto Barton la trabajadora social brinda soporte a aquellos pacientes que son vulnerables o no tienen soporte familiar, vienen solos, gestantes que desconocen sus derechos como tal y con mayor énfasis a las menores de edad, y a los pacientes del programa de tuberculosis, quienes en su mayoría se sienten discriminados laboralmente. A todos ellos se les busca educar para que puedan manejar de manera adecuada su situación, teniendo las herramientas necesarias para hacerlo. “yo siento que debo decirles a los pacientes las cosas como son, dándole un enfoque de derechos, género y desarrollo humano, haciéndole sentir al paciente que yo me pongo en su lugar y que él se ponga en el mío”, resalta Melina.
¿Qué diferencia podríamos encontrar con el trabajo que realizan las trabajadoras sociales en el hospital?
Melina nos explica que la atención es diferente porque ahí ven a los pacientes ya hospitalizados: «hay que hacer seguimiento a pacientes con altas prolongadas y/o patologías complicadas». Las trabajadoras sociales en nuestro hospital tienen que hacer un seguimiento cuando ya el paciente está enfermo, en cambio en atención primaria, por ser un centro de prevención, debemos evitar que el paciente llegue al hospital sin soporte familiar y sin la información adecuada. Si va a ir, que vaya con un soporte emocional.
El trabajo social que se realiza en nuestro centro de atención primaria es básicamente eso: prevenir, educar, y fortalecer las redes de soporte social del paciente para que este se encuentre bien.