Químico farmacéutico hospitalario

A lo largo de la historia, siempre existió un curandero, un mago, un manipulador de pociones encargado de experimentar con sustancias y tratar a enfermos y heridos. Siglos después, y gracias a los grandes avances de la ciencia y los estudios sobre la composición y las propiedades de plantas y hierbas, son los químicos farmacéuticos los encargados de ocupar este valioso rol en la sociedad.

En el Perú incaico, la práctica farmacéutica se encontraba tan cercana a la ciencia como a la magia. El erudito Hermilio Valdizán, médico peruano especializado en los campos de la psiquiatría y neurología, autor del primer tomo del Diccionario de la Medicina Peruana, explicó que durante las épocas incaicas hubo muchos personajes expertos en curar gracias a su conocimiento sobre las virtudes y propiedades de ciertas yerbas, raíces, leños y plantas que crecían en nuestras tierras. Valdizán señala que este conocimiento servía no solamente para curar, sino también para matar o atontar a sus enemigos. Esta ambigüedad entre remedio y veneno responde al mismo concepto grecolatino de phármakon y se encuentra presente en el uso de las hierbas medicinales en el Antiguo Perú. De este vocablo phármakon procede la palabra farmacia.

Farmacias en hospitales

Los Químicos Farmacéuticos dedicados a las farmacias hospitalarias tienen la misión de servir a la población en sus necesidades sanitarias a través de la selección, preparación, control y dispensación e información profesional, todo ello enfocado a conseguir un uso eficaz, seguro y de calidad de los productos farmacéuticos y productos sanitarios. La especialización del Químico Farmacéutico hospitalario lo ha llevado a incorporar en sus actividades la preparación de la nutrición parenteral, la reformulación de medicamentos, ajustes de dosis y la elaboración de preparados galénicos y magistrales.

El paciente y su pronta recuperación son los ejes centrales sobre los cuáles nuestros profesionales de farmacia desarrollan su trabajo, que contribuye a la mejora de la calidad asistencial, a ordenar y simplificar procesos y a generar información para una adecudad gestión clínica. Además, nuestro equipo, tanto en el policlínico como en el hospital, está poniendo en marcha sistemas innovadores en la gestión de la farmacia hospitalaria que redundan en el bien del paciente y del sistema nacional de Salud.